Durante el confinamiento eché de menos el cine. Sí, teníamos Netflix, Amazon Prime, Movistar Plus, HBO... pero no es lo mismo. Por eso, en cuanto salimos, intentamos ponernos al día con lo poco que estrenaban. Fue la época de ver ‘La boda de Rosa’, ‘Anne’, ‘Adú’, y ‘Las Niñas’, películas que, junto a ‘Akelarre’ (esta no la he visto) ayer acapararon la mayoría de Goyas en una gala híbrida, con los nominados en sus casas. Consecuencia de la pandemia, claro.
El Mundo |
Fue una gala sin aplausos, pero una gala espontánea, emotiva y que nos deja numerosas anécdotas. Para empezar, no tuvimos que soportar chistes malos ni parodias sobre las películas. Recordaremos estos Goya 2021 por ser la gala en la que conocimos a Alejandra, la hija de Salvador Calvo (Goya a Mejor Dirección por ‘Adú’); por escuchar a Nerea Torrijos, que ganó el Goya a Mejor Diseño de Vestuario por ‘Akelarre’, decirle a su novio ‘Ven aquí, hostia’ durante su discurso de agradecimiento; por el adorable regalo que Mario Casas recibió de su hermano pequeño; por los dos ositos ‘que acompañaban’ a Javier Cámara en su sofá; por la alegría en la habitación del hotel en la que estaba Natalia de Molina cuando una de sus acompañantes pensó que el Goya a Mejor Actriz de Reparto era para ella y no para Nathalie Poza, por el homenaje, el 'aplauso ficticio' en forma de baile y el discurso de Ángela Molina y, en definitiva, por entrar en casa de todos los nominados. Pedían María Casado y Antonio Banderas, presentadores de la gala, que no pasara a la historia como la gala del covid. Para mí, pasará a la historia como una de las mejores galas que he visto que, además, acabó con la fabulosa ‘Moon river'. Todo un acierto para alguien que, como yo, tiene 'Desayuno con diamantes' en la lista de películas favoritas.
Vanity Fair |
Si la gala fue diferente, también lo fue la alfombra roja, pero no por los looks que vimos, sino por ser presencial y telemática y por la importancia que tuvieron las Redes Sociales, sobre todo, para ver los outfits de los nominados. Había mucha expectación por ver si alguno de nuestros actores o actrices se marcaba un ‘Jodie Foster’ y salía con pijama y pantuflas, pero no fue así. En general, fue una alfombra roja sobria, pero muy similar a la de otros años.
Leía esta semana en el periódico La Razón un reportaje en el que hablaban con diferentes estilistas españoles. Algunos como Cristina Reyes, que vistió a María Casado, comentaban que tenía que ser una alfombra roja contenida. Otros, como Arturo Argüelles, consideraban que se debía apostar por el color, por diseños arriesgados y por huir del minimalismo.
Ayer vimos un poco de todo. Estas son las lecciones que nos dejó la alfombra roja:
- Blanco o negro, ¿acierto seguro? Al igual que en la alfombra roja de los Premios Feroz el pasado martes, el negro fue uno de los colores predominantes. Eligieron este color Penélope Cruz (Chanel), María Casado (Pronovias), Patricia López Arnaiz (Óscar de la Renta), Belén Cuesta (Carolina Herrera), Nawja Nimri (Loewe), Ángela Molina (Armani Privé), Kity Manver, Pilar Palomero, Icíar Bollaín, Marisa Paredes (Duyos) y Emma Suárez (Giorgio Armani).
El blanco también fue otro de los grandes protagonistas y llegó de la mano de Aitana (Versace), de la periodista Elena Sánchez (Fernando Claro), de Natalia de Molina (Juan Carlos Pajares) y Candela Peña (Redondo Brand) Y, un año más, hubo quien apostó por el binomio blanco/negro como Verónica Forqué o Amaia Aberasturi (Dior).
- El rojo puso la nota de color a esta sobria alfombra roja. De este color vimos a Elena Irureta, Rozalén (Otrura), Marta Etura (Redondo Brand), el estampado de María Barranco, que, al igual que el año pasado, confió en Pertegaz y el de Daniela Santiago con su Roberto Cavalli. La ganadora del Goya a Mejor Actriz Revelación Jone Laspiur, eligió un vestido en color anaranjado (poco favorecedor para mi gusto) y Nerea Torrijos, ganadora del Goya a Mejor Diseño de Vestuario apostó por introducir el mostaza en un modelo diseñado por ella y confeccionado por Peris Costumes.
La Tribuna de Albacete |
Nerea Torrijos |
- La importancia de ser uno mismo como Milena Smit y Fernando Valdivieso. La pareja me recuerda a Macarena Gómez y Aldo Comas porque cuando pisan una alfombra roja no dejan indiferente a nadie, independientemente de que gusten o no. Ella, de Givenchy. Él, de Moschino. Explica Freddy Alonso, estilista de Milena Smit, que es un gusto vestirla porque se atreve con todo. El Givenchy de ayer es un ejemplo, como también lo fue el modelo de Jean Paul Gaultier en los Feroz o el abrigo bordado de Paco Rabanne de los Premios Forqué. Son looks que, a priori, no me gustarían, sin embargo, para ella los veo perfectos. De hecho, es una de las que se ha colado en la lista de las mejor vestidas de la noche según los expertos.
La estilista Cristina Rodríguez, a la que por sexta vez se le escapa el Goya, también demostró que, tanto fuera como dentro de la alfombra roja, siempre es ella misma. Su vestido azul eléctrico de tul es el primer trabajo de Óscar Peña, alumno de la última edición del Diploma Vogue de Estilismo y Producción de Moda.
Nathy Peluso pisó la alfombra roja con un vestido en azul claro diseñado por ella misma. ‘Lo boceté, lo dibujé y me imaginé el movimiento circular. Me parece que tiene fuerza y a la vez es clásico. Me gusta, sobre todo, los toques rojos”, explicó en la retransmisión de la alfombra roja de RTVE.
Telva.com |
RTVE.ES |
¡¡El de Ángela Molina me enamoró!! Y el de Verónica Forqué también me gusta mucho.
ResponderEliminarGenial el post, como siempre! Aprendo un montón cada año, con detalles en los que no me había fijado.